La
ACJ-YMCA Santo Domingo trabaja arduamente en la ayuda a las
personas damnificados del terremoto ocurrido el pasado 16 de abril del 2016
tras adecuar las instalaciones como un albergue temporal.
Como organización se dio una
respuesta inmediata a la situación del país con la ayuda internacional y se
abrieron las puertas del albergue desde
el 20 de abril con la ayuda de todos los voluntarios ACJ- YMCA y personas de
la comunidad. En la actualidad son 23
personas entre mujeres, hombres y niños que se encuentran alojados aunque
existe capacidad para 50.
Diofilda Cobeña, es una
voluntaria que ayuda en la preparación de alimentos en la fundación, ella vive
en la 30 de julio sector 1 de Santo Domingo. Comenta que se siente muy contenta
por prestar sus servicios a las personas
que lo necesitan tanto en la fundación y otros albergues distribuidos en la
ciudad.
Por otro lado, Maryuri
Rodríguez, secretaria de la ACJ-YMCA, habla sobre los beneficios que reciben
las personas que albergan en la fundación como alimentación, vivienda,
vestimenta, capacitación sobre emprendimiento, servicio médico en medicina
general, odontología, ginecología, pediatría y psicología con profesionales que
colaboran como voluntarios (incluye citas médicas y medicinas).
Uno de los servicios más
importantes para los refugiados es la ayuda psicológica que les brindan. En el
caso de Marco Jama que vino con su esposa y sus tres hijos desde Pedernales
comenta que se siente mucho mejor y ha podido encontrar esperanza para
nuevamente comenzar una nueva vida. Se adapta al clima, a la vegetación, él
está contento con la terapia que recibe
y le gustaría encontrar un trabajo. Tiene experiencia como obrero en una
fábrica camaronera y chofer de mototaxis.
Fabricio Garrido, psicólogo,
trabaja en la Unidad Educativa “Madre Laura”, es quien brinda ayuda a los
albergados con entrevistas y terapia individual. En los aspectos más
importantes que trata son el trauma para motivarles seguir con proyectos a futuro
y así insertarles el autoestima.
La mayoría de albergados que están en
capacidad de trabajar piden a la ciudadanía un empleo para volver a generar
ingresos económicos en sus hogares y tener sus propios bienes. Aunque en
ACJ-YMCA se preocupa por fomentar emprendedores y que ellos creen su propio
negocio con la ayuda de entidades públicas y privadas. Los niños disfrutan del
nuevo hogar se divierten jugando, viendo películas y haciendo actividades
didácticas.
Si desea colaborar con el
staff de voluntarios o contribuir con su tiempo o ideas visite ACJ-YMCA en
calle Antonio Ante, entre Av. Quevedo y Av. Chone (Parque San Francisco) o
escribe al e-mail presidencia@acjecuador.org.
AUDIO: Más voluntarias 👈(click)
Autorora: Ana Verónica Parra
AUDIO: Más voluntarias 👈(click)
Autorora: Ana Verónica Parra